A inicios de esta semana, el rey del streaming había anunciado que pondría en pausa todos los futuros proyectos y adquisiciones de Rusia, uniéndose a una creciente lista de empresas que han cortado sus lazos con el país, como Disney o WarnerMedia. Netflix tenía cuatro proyectos originales rusos en marcha, entre ellos una serie de suspense criminal dirigida por Dasha Zhuk, que estaba en fase de rodaje y que ha sido suspendida. Recientemente, Netflix también se negó a emitir 20 canales rusos de propaganda en abierto que estaba obligado a albergar en virtud de la legislación rusa.
Ahora, la empresa ha dado un paso más allá anunciando el cierre temporal de su servicio por completo en el país. “Dadas las circunstancias sobre el terreno, hemos decidido suspender nuestro servicio en Rusia”, dijo un portavoz de Netflix.
Las repercusiones económicas a las que se ha enfrentado Rusia tras su decisión de entrar en guerra con Ucrania han sido intensas. No sólo el país está lidiando con amplias sanciones, sino que muchas empresas y organizaciones se han retirado de Rusia. Empresas como Microsoft, Apple y Dell han anunciado que han suspendido sus ventas en el país, mientras que Ikea ha cerrado tiendas y Nike ha dicho que ya no cumplirá con los pedidos en línea. En el ámbito del entretenimiento, todos los grandes estudios han anunciado que dejarán de estrenar sus películas en Rusia.
Netflix tampoco tenía mucho tiempo en Rusia. El servicio fue lanzado en 2016 y tiene una presencia relativamente pequeña, con aproximadamente un millón de suscriptores en el país, recordando que cuenta con 222 millones de suscriptores en todo el mundo. Las operaciones del servicio en el país funcionan como una empresa conjunta con el National Media Group de Rusia.
Netflix también ha anunciado recientemente que pondrá a disposición del público el documental de 2015 “Winter on Fire: Ukraine's Fight for Freedom”. La película de no ficción se centra en las protestas del Euromaidán en Ucrania, que fueron desencadenadas por la decisión del expresidente Viktor Yanukovich de no firmar un acuerdo con la Unión Europea y, en cambio, optar por fortalecer los lazos con Rusia. Esas protestas acabaron con la destitución de Yanukóvich. También exacerbó las tensiones con Rusia, ya que Vladimir Putin utilizó el derrocamiento como pretexto para invadir y anexionar la península de Crimea de Ucrania.
La invasión de Ucrania por parte de Rusia en 2022 ha provocado una crisis humanitaria y de refugiados, además de aumentar el temor a que pueda desencadenar un conflicto nuclear.
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